Te regalo una idea – alquila un hotel en las montañas
Han comenzado las vacaciones en Austria. Estamos en un lugar que es muy popular en invierno para hacer ski. Ahora en verano está prácticamente vacio.
Llegamos el sábado a Obertauern en Austria. Fueron casi nueve horas de viaje. Nos levantamos a las dos y media de la madrugada para salir una hora más tarde en coche. Fue un viaje durillo pero tras superar mi punto más bajo a las cinco de la madrugada el viaje se hizo más leve de lo esperado.
Cuando llegamos nos dimos cuenta de que el sitio estaba un poco más tranquilo de lo habitual. Se veían menos turistas en las calles del pueblo. Ya nos habían advertido de que el sitio en verano estaba un poco muerto porque la temporada fuerte la tenía en invierno. Para nosotros tampoco es relevante dado que queremos hacer senderimos en las montañas y para ello no necesitamos estar rodeados de muchas personas. De hecho incluso lo veo como una ventaja.
Otra cosa que me llamó la atención pero que al final es lógico es que la gran mayoría de los hoteles están cerrados en verano. Es decir que o bien ganan tanto en invierno que van sobrados o que simplemente no les renta abrir las puertas en verano.
De aquí me surgió una idea. ¿Y si un emprendedor alquila el hotel entero únicamente en verano para luego subarrendarlo a través de Airbnb y Booking? El alquiler tendría que ser suficientemente bajo para que pueda por su parte hacer ofertas atractivas en esas plataformas que le permitan sacarle un beneficio de forma sencilla. Al fina el propietario del hotel gana más que cero. Con ciertas garantías y avales para cubrir posibles daños debería estar interesado sacarle un dinero extra sin tener que trabajar activamente para ello.
Esta simple forma de arbitraje ya podría funcionar. Si además ofreces un valor añadido a través de actividades organizadas puedes cobrar un poco más y te pones en una posición dónde podrías adquirir y vender habitaciones a grupos enteros. Típicamente gente que hace senderimo suele tener un nivel de ingresos medio-alto y pueden permitirse gastarse de media más dinero que el típico turista de la playa que con el bocata de tortilla y la crema sola ya tiene el presupuesto agotado. Esto no lo saco de ningún estudio de mercado sino simplemente de la observación. Ahí te lo dejo. Ya sabes, las ideas son baratas asi que te dejo que te pongas con la parte difícil… 😉
Stay tuned.
