El truco de ser un buen gestor de proyectos
Ahora mismo mi principal cliente me ha contratado nuevamente para ayudar en la gestión de un proyecto. Esto es mi truco para hacer un buen trabajo.
Sí, lo sé. No he podido resistir a utilizar la palabra “truco” en este título. En realidad es algo de sentido común por lo que no se debería llamar asi. En el día a día veo que al menos en mi entorno de empresa donde estoy contratado como consultor nadie lo está haciendo.
Me sirve sobre todo para esto:
- No tener nunca tareas acumuladas.
- Ser percibido como una persona proactiva.
- Acortar el tiempo de solución de asuntos por días y semanas.
Bueno, llegado a este punto ya toca contarlo.
Vamos a por ello. Antes te doy un poco de contexto. Me han contratado para poner orden en los procesos de ventas dentro de los departamentos de la empresa. En el pasado había crecido el caos y los problemas se habían acumulado convirtiendóse en piedras giganes inmovibles que ya nadie ha querido tocar.
¿Qué ha sido la raiz del problema?
En las conversaciones con las problemas me daba cuenta que surgían temas.
“Esto no sé quién es responsable.”
“Nadie me ha contactado.”
“[…] no me ha respondido sobre esto.”
“No tengo claro cómo funciona.”
Podría seguir asi eternamente. Estas dudas tenían una solución sencilla. Consistía en mover el culo y preguntar a la próxima persona que podía resolver la duda y asi a la próxima hasta que encontraba la respuesta que posteriormente devolvía a la persona que había tenido la duda al principio.
Para no tener tareas acumuladas cuándo surge un tema pequeño lo suelo realizar al instante. Tengo contacto semanal con unas 50 personas cada semana en este proyecto y es complicado mantenerlo todo en la cabeza.
Me he dado cuenta que el resto de personas no funciona asi. No se ponen a investigar. No son capaces de quitar del camino las pequeñas piedras porque lo único que ven es la roca grande inmovible que les hace paralizar. Cuándo hay una roca saco el martillo para apartar pequeñas piezas. No soluciona todo el problema pero con el tiempo lo hace más pequeño hasta que desaparece.
Esto va en linea con mi filosofía de trabajo. Tu éxito no depende de mover rocas sino más bien de quitar pequeñas piedras cada día. Ya lo tienes. Eso es mi truco.
Stay tuned.