Cómo he conseguido mejorar mi calidad de vida un 300% en los últimos 10 meses
Te he puesto un 300% para ponerte algo. Evidentemente esto no es algo que se pueda medir pero tengo claro que mi situación ahora no tiene nada que ver con lo que estaba viviendo.
Hará cosa de un año que pensaba de forma diferente. “Dos años más y ya tengo el capital necesario para poder avanzar con mi propio negocio en Amazon”. Estaba muy equivocado. Me había empujado hacia tal punto que estaba a punto de tener un burnout. Las señales eran evidentes. Estaba quemado porque mi único objetivo era llegar al viernes como sea y pensando en estrategias para “sobrevivir” el día a día de alguna forma. No estaba disfrutando con lo que estaba haciendo.

Menos proyectos, menos estrés
Volver a la normalidad no era complicado. Sabía exactamente lo que tenía que hacer. Coger menos proyectos siempre era la solución evidente. Lo curioso es que nunca he tomado la decisión consciente sino que simplemente mi situación profesional ha evolucionado hacia un punto de menos proyectos. Por suerte ha sido asi. El nivel de estrés ha bajado de 150 a 70. Algo sano digamos.
Más organización
Nunca he sido una persona desorganizada a nivel profesional pero siempre puede ser mejor. Al final si quieres tener éxito con algo vas a necesitar a personas que quieran recorrer ese camino contigo. Si tú eres organizado y el resto pues no sirve de mucho. Gracias a Jira y Confluence esto está cambiando. Todavía llevamos poco tiempo pero el trabajo en esprints es nuestra solución. Esta semana acabamos el primero y pinta bien.
Más salud
Tampoco puedo decir que antes no hacia cosas por mi salud. Hay únicamente una pequeña cosa que ha cambiado. Ya hago hace años ayuno intermitente (de lunes a viernes comiendo una vez al día), deporte prácticamente a diario y dormir lo necesario. Hoy nuestro hijo del medio ha tenido pesadillas y he dormido bastante peor de lo normal pero es lo que hay cuando tienes hijos (también lo he disfrutado tenerlo con nosotros porque estos momentos serán cada vez más raros). La cosa que ha cambiado ha sido Crossfit junto con mi mujer. El ritmo ha bajado de una vez por semana por temas de planes personales. Lo hago sobre todo para que ella haga más ejercicio de fuerza que para dentro de 20 años le servirá.
Un reto diferente
Ya soy entrenador oficial del equipo de fútbol de mi peque. Las fórmulas de llevar un negocio no se aplican aquí. Al principio me ha intimidado ponerme delante de un grupo de 13 niños de 9-10 años. “¿Me harán caso? ¿Será un caos? ¿Seré capaz de enseñarles algo?”. Ahora disfruto de las sesiones de entrenamiento de lunes y jueves. Sábado tenemos partido y a pesar de que todavía no hayamos tenido una victoria en los primeros dos partidos disfruto enormemente del viaje. No te puedes imaginar el orgullo que se siente cuando ves que aplican cosas que les has enseñado porque lo hemos practicado en el entrenamiento.
A ver cómo sigue la cosa. Hoy tengo doble sesión de entrenamiento: Freeletics primero y Crossfit después. Será divertido.
Stay tuned.