Cómo estoy utilizando el mes de enero para empezar bien el año
Ha llegado el mes de enero y ya voy tarde para planificar el resto del año. Ya urge tener claro lo que queremos lograr para empezar a recorrer el camino necesario.
Enero para muchos es un mes especial. Teniendo en cuenta las fechas que son posiblemente el 80% todavía no ha abandonado sus propósitos de año nuevo. No aguantarán mucho más, las estadísticas no mienten. Nunca he sido de propósitos de año nuevo. Si hay que hacer algo da igual la fecha. Al menos para mi.
Hay cosas que no se me dan demasiado bien. A la hora de planificar soy un poco caótico y me dejo llevar más por mis emociones que por datos o el sentido común. Las cosas como son. Es por ello que estas fechas son increíblemente importantes porque requieren pensar fríamente en lo que más sentido tiene para los próximos meses.
Nuevos objetivos, nueva motivación
Fines de diciembre cuando ya habíamos alcanzado los objetivos principales y batido los récords de años previos por todo lo alto, tuve un pequeño bajón de motivación. ¿Y en enero qué? ¿Voy a tener la misma fuerza y energía para levantarme por las mañanas? Me duró un par de días pero finalmente volví a encontrar esa fuerza que me ha empujado durante todo el 2020.
Un objetivo ya tenemos fijado. Queremos alcanzar los 800k de facturación en Amazon. Sería duplicar los resultados del año que ya fue muy bueno pero veo totalmente factible lograrlo. Luego está MarktMaat, invertir en Lego, lanzar un producto propio en Amazon, vender en EEUU y otro proyecto nuevo que me ronda mucho en la cabeza últimamente.
A pesar de que 2020 haya ido muy bien no sé nota. Intento crear una situación de urgencia donde cada mes de nuevo es importante.
La ilusión por nuevos temas es la base de todo. Sin esta motivación no sería capaz de moverme y levantarme por las mañanas. Esa parte está resuelta podríamos decir.
Priorizar, delegar y enfoque
A partir de febrero estaré muy enfocado con proyectos de clientes. Ya lo he dicho en varias ocasiones: es una forma de levantar capital para los proyectos propios. En especial la inversión en Lego y el lanzamiento de un nuevo proyecto en Amazon van a requerir capital.
Priorizar las tareas más importantes es una parte pero delegar es aun más importante todavía. Estoy gestionando una empresa desde la distancia a más de 2.000 kilométros en remoto desde hace casi 2 año. Está funcionando bastante mejor de lo que me hubiera imaginado al principio pero todavía queda mucho potencial de mejora.
Tengo claro que no podemos llevar a cabo todo lo que tenemos. Hay que centrarse en pocas cosas a la vez y planificar el orden en el que vamos a llevar a cabo las cosas.
Te seré sincero. Ahora mismo todavía no tengo 100% claro cómo vamos a poder llevar a cabo todos los proyectos. Aun asi estoy tranquilo. Encontraremos un camino. Hasta ahora siempre lo hemos encontrado. ¿Por qué esta vez va a ser diferente?
Stay tuned.