Por qué somos una empresa del montón

Estamos en un buen momento como empresa. Las cosas están yendo cada vez mejor. Aún asi hay que decirlo. Somos una empresa del montón.

El otro día ví un video de Kobe Bryant. En el explicaba la ventaja que tenía levantarse temprano para él. En resumen: se levantaba a las 3 de la mañana cuando el resto de jugadores de la NBA lo hacía a las 8 de la mañana. Esas 5 horas de ventaja le permitían entrenar dos veces más al día que el resto. A lo largo del tiempo había acumulado una ventaja competitiva tan exorbitante por el efecto acumulado que estaba muy por encima del resto.

Y por eso somos una empresa del montón

Las cosas están yendo bien pero si nos van bien a nosotros posiblemente al resto también. Vamos encima de una ola que están tomando muchos vendedores en estas fechas. Al final hay que ser muy torpe si en estas fechas no vendes. Navidades se están acercando. Si no vendes en estas fechas esto sin duda no es para ti.

El vídeo me ha hecho pensar. Ser una empresa muy por encima del resto requiere hacer sacrificios muy por encima del resto.

¿Lo estamos haciendo?

Posiblemente no.

¿Respetamos siempre todas las fechas de entrega de tareas?

¿Realizamos todas las tareas con un nivel de excelencia por encima de la media?

¿Trabajamos en un modo “desagradable” porque vamos más allá haciendo la milla extra?

¿Tenemos el hambre necesario que nos permita ir más allá que los demás?

Nuestras limitaciones como empresa y equipo

Soy el primero que tiene que dar ejemplo. Si respondo todas esas preguntas para mi tengo que decir que no siempre estoy en el nivel de exigencia que requiere salirse de lo normal para dejar de ser una empresa del montón. No es suficiente hacerlo durante una semana o un mes. Es cuestión de aplicarlo como una mentalidad. Es cuestión de subir tu nivel mínimo de exigencia a un nivel que está por encima del nivel de excelencia del resto.

No nos limitan nuestras posibilidades sino nos limita nuestro estandar mínimo hacia nosotros mismos. ¿Cuántos sacrificios estamos dispuestos de hacer?

Yo tengo claro que aquí tenemos un techo. Yo no estoy dispuesto a sacrificar mi vida familiar o mi salud mental para tener más éxito. Igual que no lo voy a exigir a nadie de mi equipo.

Lo bueno

Tenemos la voluntad de querer mejorar, de ir por más. Tenemos que aprender lo que significa pasar al próximo nivel. No nos podemos relajar en lo que estamos consiguiendo. Si alcanzamos los 2.000 euros diarios hay que pensar en los 3.000, para luego pasar a 5.000, para pasar a 10.000, etc.

Tenemos que aumentar nuestro estandar mínimo. No es lo que conseguimos en nuestros mejores momentos lo que nos define, sino en los peores. Las exigencias más bajas son las que determinan lo que hacemos y en consecuencia el resultado.

Lo bueno es que en las últimas semanas hemos aumentado de nivel. Hemos pasado a trabajar mejor. Las exigencias mínimas ahora están en otro punto comparado con lo que empezamos.

Nos queda mucho camino por delante pero lo bueno es que tenemos tiempo. No nos tenemos que retirar a los 35 ni tampoco a los 40. Lo importante es seguir jugando.

Stay tuned.

CATEGORIES
TAGS
Share This

COMMENTS

Wordpress (0)
Disqus ( )