Pequeños errores que estamos cometiendo nada más empezar el año
Un negocio de siete cifras no se crea en dos días. Ya llevamos siete años con Amazon y este año nos volvemos a poner como objetivo la cifra mágica. Ha empezado 2023 y para alcanzar objetivos tan grandes hay que hacer las cosas pequeñas bien. ¿Vamos por el buen camino?

No lo creo.
Contenidos
Hemos bajado mucho el ritmo de trabajo
Y lo entiendo porque soy el primero dando mal ejemplo. Cuando has dejado Navidades atrás te sientes aliviado y deprimido al mismo tiempo. Pasaremos de facturar más de 160k en diciembre a 35k en enero (con suerte). No hay gran cosa que podamos hacer para evitar tener cifras tan bajas. Al menos no este año. Es bueno respirar profundamente para avanzar con fuerza. Estamos a mitad de enero y toca ya subir el ritmo otra vez.
No ser lo suficientemente esctrictos en el seguimiento de trabajo
Una vez más: culpable. A mitad de 2022 hemos dejado de darle seguimiento a las tareas en Asana. Ha sido un proceso silencioso. No he estado encima de las cosas como lo estoy haciendo ahora. De ahí también ha surgido el problema. Tenemos que pasar a entender que nadie tiene que estar encima de nosotros para trabajar de forma disciplinada. Hay que apuntar las tareas y darles seguimiento para que las cosas estén al día. Para triunfar se requiere un ingrediente esencial: disciplina.
No haber finalizado la planificación para 2023
Y sigue el tercer strike por mi parte. Todavía no he finalizado la planificación financiera para las empresas. He iniciado y en parte he acabado pero no he llegado hasta el final de la tarea. Tengo que ponerme las pilas para empujar este tema porque será la base para reducir sorpresas a lo largo del año.
En resumen: grandes objetivos requieren muchas pequeñas acciones. Nos hemos relajado y es normal. No hay que dejar pasar enero para darse cuenta que cada día cuenta. Esto no es un esprint sino una maratón. Ha acabado el descanso. Hay que seguir haciendo metros.
Stay tuned.