La delgada linea entre ventajas y desventajas de dejarse frenar por miedo

Tener miedo no es siempre algo malo. Te protege de hacer tonterias. Es un instinto que nos ha mantenido con vida pero también nos frena a la hora de tomar decisiones importantes.

Últimamente Youtube me ha sugerido videos de gente mayor que dan consejos de vida. Uno de los temas recurrentes que me ha llamado la atención ha sido “no tener miedo”. Muchos miran atrás y hubieran querido tener menos miedo a la hora de tomar alguna decisión de vida arriesgada.

Es algo que me ha hecho pensar porque es algo que creo que en mi caso no es asi. Quiero decir que muchas veces que he tenido que tomar una decisión en este contexto he optado por la vía complicada.

  • Estudiar un año fuera de Alemania en un pueblo de Paris en vez de quedarme en casa.
  • Sacarme un doctorado en Suiza y pasar cuatro años ahí en vez de empezar a ganar dinero ya.
  • Montar una start-up en Madrid en vez de apostar por un trabajo fácil.
  • Mudarme a Alicante para empezar un nuevo negocio con un nuevo socio.
  • “Volver” a Alemania para acelerar el crecimiento de mis negocios en vez quedarme en España.
  • Comprar un almacén para montar la infraestructura necesaria en vez pagar un alquiler.
  • Levantar capital en forma de financiación bancaria en vez de ir más despacio.

Eso son algunas de las decisiones de vida que he tomado junto con mi mujer. No todo me ha ido bien. De hecho he tenido que luchar mucho en mis años de emprendedor para llegar a fines de mes con mis empresas. He tenido y sigo teniendo una responsabilidad importante para que los que confian no se vean nunca defraudados.

Los momentos complicados de mi viaje me han hecho más fuerte por lo que pocas cosas me ponen nervioso. No me estreso fácilmente.

¿Para qué te cuento todo esto? La pregunta es la siguiente. ¿Cómo saber si el miedo que sentimos ante situaciones parecidas a las mías es bueno para evitar que hagamos tonterias o es malo porque nos hacer perder oportunidades para tener una vida plena?

La pregunta que yo me haría en tu puesto sería esta.

¿Qué es lo peor que me puede suceder?

Muchas veces la respuesta racional es que en realidad no hay graves consecuencias.

Si aumentas continuamente la apuesta tal como lo estoy haciendo yo con mis negocios las consecuencias pueden ser graves. Aun asi tiro para adelante y no me lo he pensado demasiado a pesar de muchas voces que me han querido aconsejar de bajar el ritmo.

Si todo se viene para abajo. ¿Tengo la fuerza y motivación para volver a empezar desde cero?

Sí, sin duda. Asi que adelante.

Esto es un viaje y hay que disfrutar de las vistas.

Stay tuned.

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