Los emprendedores no van a levantar este país – la perspectiva de un “alemañol” en España
No existen las excusas. Si quieres conseguir algo en la vida tienes que luchar por ello. No depende de nadie. Los emprendedores no van a levantar este país. No es suficiente.
Somos pocos. No puede depender tanto de nosotros. Los emprendedores tienen ideas para levantar España pero no es suficiente porque depende demasiado de terceros. Existe un problema grave de comprensión. De donde no hay, no se puede sacar. Este mensaje no está llegando.
Problema cultural
Hay un problema de mentalidad como dice también Juan Macias en su blog. Desgraciadamente no está limitado únicamente al tema de la innovación. Es cultural. España no es el único país que lo tenga pero aquí lo percibo como grave. Nunca he entendido a mis amigos españoles con la obsesión que tenían de comprarse un coche nuevo con el primer sueldo y un piso con el segundo. Eso en Alemania no existe.
No entiendo algunas protestas contra los recortes con el argumento que la gente tiene que pagar sus hipotecas. El haber adquirido un nivel de costes mensuales que hay que cubrir es un problema personal. El estado no es el responsable de la decisión individual sobre la compra de pisos y casas. Tal vez lo haya favorecido y eso definitivamente ha sido un error, pero no culpes a nadie por tus propias decisiones.
Tus hijos, tu responsabilidad
Si quieres educación para tus hijos será mejor que te ocupes personalmente y no hagas a nadie responsable para ello. Mis padres nunca me han podido ayudar en el colegio o en el instituto. Mi padre ha sido albañil y mi madre modista. Para los pisos que compraron en Alemania y España no cogieron una hipoteca. Hemos vivido bien y siempre dentro de nuestras posibilidades.
Siendo hijo de “Gastarbeiter” (así llaman en Alemania a los trabajadores invitados que llegaron a partir de 1960 al país) estadísticamente tenía pocas posibilidades de llegar a ninguna parte. Aún así he terminado mis estudios de ingeniero industrial en Alemania, ciencias empresariales en Francia y he finalizado un doctorado en sistemas de información de negocios en Suiza. Tal vez mis padres no me hayan podido ayudar mucho en mis estudios pero he aprendido de ellos que todo es posible si luchas por ello. Nadie es responsable para tu propia felicidad. Soy padre y son valores que pienso transmitir a mis hijos.
No vivas por encima de tus posibilidades
Si eres emprendedor de una start-up y estás viviendo por encima de tus posibilidades tienes fecha de caducidad. Esto no es Estados Unidos y no serás el próximo Instagram así que no te hagas muchas ilusiones. No pidas más dinero a nadie si estás viviendo por encima de tus posibilidades. Si eres particular tendrás que adaptarte a tus ingresos mensuales o buscar alternativas.
Entre todos
Emprender cuesta un huevo. A muchos emprendedores les gusta decir que han contratado a cientos de personas. La verdad detrás es que también han despedido a cientos porque muchos no tenían lo que hacía falta. Cuando empiezas en una start-up, tienes que asumir que hay que dar un poco más que en un puesto “normal”. Es tu decisión. Aunque lo haré, no me gusta sentirme obligado darte las gracias porque te estás quedando 1 hora más hoy en la oficina. Tal vez también ves que se te he dado una oportunidad que no estás recibiendo en otro sitio. Lucharé hasta lo último para pagar tu nomina a finales de mes y no cobrar yo si hace falta. Espero de ti que luches junto conmigo para que tengamos éxito. Ni más, ni menos.
Un post con un poco de todo. Autobiográfico.
Vivimos un momento complicado para levantar una empresa con el consumo de bienes y servicios en mínimos.
Sigo tu blog desde hace no mucho y siempre me han gustado los consejos que das tanto para marketing como muchas veces para la vida personal.
Esta vez creo que además te has atrevido a decir cosas que muchos nos se atreven, me ha encantado el post y creo que es una mentalidad que en España desgraciadamente, brilla por su ausencia.
Las cosas claras si señor!
Mira que son conceptos fáciles, y mira lo difícil que es que le entren a la gente en la mollera. Hay hasta un refrán para esto: “cada perrico que se lama su pijico”
1º Problema cultural 100%
2º “Ser responsable de tus decisiones” 100% pero con peros, igual que voy a un médico para que me asesore sobre mi salud(por que al final te exigen que tu , si conocimiento ninguno de medicina, tomes la última decisión) espero que la gente, que ha sido elegida para asesorar y gobernar lo que ocurre en el País velen porque no me engañen bancos, cajas, etc… esto ha ocurrido, por lo que hay gente que tiene que pagar, por dejadez en sus deberes.
3º Los trabajadores y su esfuerzo. ¿Esto trabajadores tienen parte de tu empresa? Si la respuesta es Si 100% de acuerdo, si la respuesta es NO seguro q triunfas, aunque ten claro que es por el sobreesfuerzo de alguno agradeceselo. Y si tengo muy claro que es por el INCREIBLE esfuerzo tuyo como emprendedor.
De todas formas, aunque parezca critico mi comentario, me gusta el post.
Un saludo
Completamente de acuerdo. Simplificando mucho, la clave la has señalado tu y está en la educación. Tus padres te inculcaron la cultura del esfuerzo, cosa que aquí no es común y todo parte de no saber decir “no” a los niños, se acostumbran a tener de todo, sin esfuerzo y cuando se hacen mayores ¿por qué no voy a tener un iPhone, o una tele de 46″ o un BMW? y, unido a una época de crédito fácil nos ha llevado a donde estamos. Insisto es simplificando mucho, pero sin duda una de las principales causas.
Grande Carlos, como siempre. Todos deberían leerte. Me he sentido muy identificada con ese problema de mentalidad del que hablas. He crecido en una cultura francesa, mis padres me han inculcado muchos valores de los que hablas entre ellos ser independiente y luchar siempre para conseguir lo que quiero. Comprar un piso todavía no me lo han mencionado, lejos de ese concepto me animan día tras día a esforzarme en mis proyectos, a emprender y a seguir trabajando cueste lo que cueste. Tenía claro que los 18 años serían para salir del núcleo familiar, estudiar y trabajar. Por momentos difícil, pero aprendí a valorar las cosas de otra manera. Con 25 años viviendo siempre dentro de mis posibilidades, comienzo ahora a ver lo que significa la palabra “ahorro a fin de mes ;-)” y no te lo voy a negar me continúa sorprendiendo que seamos tan pocos viviendo fuera.
Sigo siendo ese bicho raro que comenta que no se le ha pasado ni si quiera por la cabeza tener una propiedad o que el poco dinero que tiene ahorrado lo invertirá en ese proyecto al que le está dando forma. Sin duda, todo esto es CULTURAL y confío en que la mentalidad de muchos va ir cambiando; adquirir una vivienda no es una obligación o algo esencial en esta vida.
Estupendo post, como suele ser habitual.
Totalmente de acuerdo y también con los demás comentaristas en que básicamente todo se reduce a tener un problema de falta de cultura de esfuerzo (como si la hay ahora mismo, por ejemplo, en los países asiáticos) y de responsabilidad. Así que poco más queda que añadir.
No obstante, quería hacer una puntualización ya que nacido en Alemania y vivido allí hasta las 19 años y por tanto también me conozco bien el país, además también con la perspectiva de “Gastarbeiter” como lo fueron mis padres.
Se trata de que me parece importante resaltar que tampoco en Alemania todo el monte es orégano, aunque obviamente hay una diferencia profunda con España como demuestra, por ejemplo, el dato de que a pesar de una mayor capacidad adquisitiva en torno al 80% de la población vive en régimen de alquiler y no ha habido este fenómeno de “locura de nuevos ricos” que hemos vivido en este país.
Tu post puede dar a entender que la mentalidad alemana que describes es la regla universal, pero no es así.
También existe el despilfarro como mentalidad no poco extendida socialmente, especialmente en los últimos años antes de venir a España (años 90) he podido observar una increíble mentalidad despilfarradora que a mi, hijo de Gastarbeiter acostumbrado a un régimen ahorrador absoluto ya me llamaba mucho la atención.
Lo he podido observar tanto en las clases altas (de mi entorno del instituto) como en las clases medias-bajas (de mi entorno de residencia), especialmente marcado en los jóvenes que con 16 años ya hacían una “Lehre” (el equivalente a la formación profesional en España, pero a diferencia de aquí muy extendida y respetada socialmente).
Esta gente, a los veintitantos seguía igual y a los 30 posiblemente también aunque quizás con otros gustos más caros (como coches), si es que pueden.
Estos chicos se gastan absolutamente el último duro todos los meses en salir, beber como cosacos y todo tipo de chorradas similares. Era una costumbre generalizada.
En cuanto a la cultura del esfuerzo en las clases alta era, por lo general, nula. De hecho, como sabes, en el Gymnasium se hace un corte a los 16 años para poder continuar o no con el Abitur (equivale a Bachiller+selectividad).
Yo pasé una mala época entre los 14 y 16 años porque era el momento de la pijería que entonces, por cierto, se resumía básicamente a marcas de pantalones, zapatillas, los Mopeds (ciclomotor) y gadgets “simplones” como los primeros Walkman.
No fue agradable estar rodeado de idiotas con padres con pasta y ser el Gastarbeiter entre ellos, aun así me las apañe bien, pero como digo no era fácil porque eran, salvo excepciones entre las que están los amigos que aún a día de hoy conservo, chicos realmente estúpidos.
Sin embargo, la gracia está en que estos personajes desaparecieron prácticamente todos (literalmente) con el paso al Abitur (esto lo dice todo) y con ello mis problemas de “Gastarbeiter” desaparecieron porque me quedé con la gente “normal”.
No sé si sigue igual hoy o no, pero sí quería ilustrar con estos ejemplos triviales, pero creo que buenos porque son tal cual “de la calle” que tampoco en Alemania es todo oro lo que reluce y si rascamos más encontraremos más cosas en las que dejan mucho que desear, al menos, en estas generaciones que he citado.
En definitiva, este simplemente es una muestra de que los causas traen los mismos males.
Irónicamente cuando llegué a España y tuve la oportunidad de estar en el Colegio Mayor Chaminade (una magnífica experiencia) y me encontré con un perfil de gente, hijos de padres pudientes bastante diferente y para bien.
Ya para concluir, aunque pueda parecer lo contrario, este testimonio no resta ni un ápice de razón a tu artículo, simplemente quiero poner un poco en duda a Alemania como contraejemplo radical desde una perspectiva social, ya que es una costumbre generalizada la de idolatrar países como éste y también en Alemania hay mucho mierda.
Otra cosa es que desde la perspectiva macroeconómica influyen muchos factores (como su fuerte tejido industrial y cultura I+D) que tienen mucha inercia desde hace muchas décadas y explican en gran medida por qué al país le va mucho mejor que a nosotros a pesar de que, como aquí, también haya mucho burro suelto.
Totalmente de acuerdo con Javier López. Yo que vengo de familia alemana y habiendo vivido unos años en Alemania también tengo que decir que en Alemania no todo el monte es orégano, desde fuera se ve todo de manera más generalizada.
Allí lo normal es tener un piso/casa de alquiler pero es que las leyes que tienen ya son diferentes y favorecen tanto al que está de alquiler como al propietario. Aquí en España todo son problemas para el propietario que quiere alquilar.
Todo esto está muy bien, pero se os olvida el problema de fondo: la Iglesia. La iglesia católica apostolica, que en este páis durante años, y siglos, ha metido miedo a la iniciativa, a los valores personales, al desarrollo profesional, etc… solo han inculcado miedo, flagelación, analfabetismo e incultura. Y el problema persiste. En Alemania y otros países protestantes, existe la cultura del esfuerzo, y la Iglesia no ha oprimido.
Y ahora con este nuevo gobierno, volvemos al miedo, a darle mucha importancia a la Iglesia… en fin valores que solo conducen a la analfabetización.
Saludos
Gratamente sorprendida por este post. ¿Por qué siempre creemos que la culpa de todo la tienen los demás?
Las circunstancias nos afectan pero fundamentalmente somos protagonistas de nuestra vida, responsables de nuestras decisiones y tenemos que aprender a asumir las consecuencias y a aportar soluciones.
Saludos.
Don carlos debo decirte…bravo, bravo, bravísimo y olé. Nuna mejor dicho. tanto que dándote todos los crédito lo publico en mi blog. Enhorabuena macho. hasta cuando perdemos el tiempo culpando a los demás y no nos ponemos a trabajar. Si Señor!!!!
Qué buen post Carlos! otra inyección más en mis inicios como emprendedora, leerlo me pone los “pies en la tierra”… y has hablado de valores fundamentales, que sobre todo hay que tener en cuenta en este ámbito, gracias!
ah, y una nota aparte de este tema: ayer vi un Informe Robinson sobre los/as maratonianos/as de Kenia, seguramente lo conozcas, pero como sigo tu blog a diario, directamente te recordé, así que si no lo has visto, seguro que lo disfrutarás, un saludo
Si montas una empresa asumes un riesgo. Si va bien obtendrás un beneficio extra que un trabajador no obtendrá. El trabajador cumplirá su misión y por ello cobra su salario a cambio de ayudarte.
Pero este rollo para justificar un posible fracaso empresarial en base a la supuesta falta de cultura del esfuerzo no cuela.
Da igual si eres emprendedor o trabajador. Si pasas únicamente el mínimo de 8 horas al día haciendo algo que no te gusta tienes un problema. Si estas en una start-up no estás ayudando hacerse rico a nadie. Es muy poco probable que eso ocurra en España. Los casos que hemos visto hace poco han destacado tanto porque apenas ocurren. En los casos que han ocurrido los trabajadores han participado en el éxito. Una filosofía que comparto al 100%.
Sobre todo ahora cuando estás en una empresa deberías darlo todo por tu propio bien. Es tu puesto de trabajo. Es lo que te da de comer todos los días. ¿Para eso no vale la pena esforzarse y dar un poco más del mínimo firmado en un contrato de trabajo?
Es cierto que hay mucho trabajador “funcionario”, o como se ha publicado mucho, trabajadores que dedican mucho tiempo y son poco productivos. Como bien se ha comentado aqui, hay una carencia de cultura de esfuerzo de lo que al fin y al cabo es la responsabilidad de cada uno. Y tambien opino que la mentalidad influye.
Pero tambien dire que por lo general no he visto liderazgo, ni cultura de valores de empresa (o por le menos bien aplicados). Tampoco todos los emprendedores o directivos piensan siempre en el trabajador, ni ofrecen un plan de carrera, formacion, o alguna forma de evolucion o desarrollo personal. Y no es por nada, pero tambien he visto que cuando alguien ofrece la mano, se le agarra el brazo y eso sienta precedente perpetuo. Esto ultimo es ruin.
Creo que es totalmente licito esperar de un trabajador un esfuerzo acorde y mas con el momento que actualmente vivimos. Insisto, es una cuestion de responsabilidad. Aunque quizas echo de menos esa pizca de complicidad, motivacion, buen ambiente y de trabajo, de hacer tuya la parte de la empresa que te pertoca, que solo puede conseguir un buen lider y filosofia-valores de empresa.
Te doy la razón en este punto David. Aqui muchos emprendedores (me incluyo), tenemos mucho potencial de mejora.
Bueno, emprendedor o no… supongo que sí lo soy.
Me ha gustado el último punto sobre contratar a álguien. En este país el contratador busca principalmente pleitesía a un trabajador y absencia de crítica constructiva. No obstante, en este país, más que buscar fórmulas para motivar a la los trabajadores, se buscan fórmulas para crear un látigo con más puntas para que trabajen en contraposición del miedo. En fin, nunca he tenido un trabajador en nómina por el flujo irregular de trabajo que tengo, no obstante, si que tengo proveedores con los que he colaborado estrechamente y he procurado animarlos siempre que he podido, y en alguna ocasión algún chasco también ha bajado, pero tengo claro que, si la persona que trabaja para ti está contenta y motivada, si hay un error, sabes que va a hacer lo posible para subsanarlo por su propia cuenta.
Por el resto, creo que tienes razón, demasiadas ansias existen en este país para aparentar lo que uno no és, y por eso, probablemetne la gente se permitió hipotecar hasta las cejas. Básicamente creo que es una cuestión cultural y se agrava con la presión social. Yo siempre he dicho que soy de coches de segunda mano, y a mucha gente eso le suena como de pobres, pero la realidad es que comprarse un coche con un crédito de 5 años, considero que es una auténtica locura, para empezar pq la primera vez que toca la calle, el coche ya se ha devaluado un 30%, eso sin contar el riesgo de que termine siniestro total por un accidente, que se lo lleve una riada o que un gamberro decida prenderle fuego. Vamos, considero que el coche es una inversión extremadamente deficitaria, y como tal, yo lo necesito para el trabajo, pero no pienso gastar fortunas en él pese a que mis colegas lo vean como algo “de pobres”.
Bueno, esto solo es un ejemplo puntual, pero que se puede extrapolar al conjunto de la gente, por eso España es un país que tiene una cantidad de activos “tóxicos” enorme. Los bancos están cargados de créditos de dudosa calidad, y lo peor es que los mismos bancos se aferran a esos tóxicos para no tener que admitir perdidas. Resulta curioso cuando La Caixa, el Santander o el BBVA salen y dicen que han tenido “X” cantidad de millones de beneficios, me gustaría saber exactamente de esos beneficios cuantos son beneficios fictícios basados en los activos “tóxicos”.
Muy de acuerdo con todo lo dicho, los valores que se enseñen dentro de casa son fundamentales y basicos para alcanzar objetivos personales, Si no sienten la necesidad dificilmente aprenderan a valorar y poner en practica principios basicos, como la responsabilidad, la honestidad, el respeto, peor aun la satisfaccion de alcanzar algo con esfuerzo propio buscando alternativas para el crecimiento pesonal contribuyendo con el desarrollo social.
Si bien esto de las hipotecas es un problema cultural aquí en España (mi padre dice que fueron los andaluces los que enseñaron a los catalanes a que es mejor comprar que alquilar) llegó un momento en que el alquiler de una vivienda estaba muy por encima del precio de la hipoteca. Mientras la hipoteca podía costar unos 500€ (hablo por allá el 2004-2006), un alquiler se podía ir tranquilamente a los 700-800€ y, por supuesto, nadie quiere pagar más por lo mismo… Los pisos por plano volaban, si querías comprar un piso a un precio razonable, acorde a tus posibilidades, o bien tenía el piso en aquellos momentos 40 años y en el peor barrio de tu ciudad, o tenías que irte a vivir a 30-40km de tu ciudad natal, con el sobrecoste del transporte para poder ir al trabajo… 2 coches 2 seguros, 2 gasolinas, 2 mecánicos, etc.
Mis 2 hermanas ya han terminado de pagar la hipoteca, en sut época, de tan sólo 15 años. Y ahora el sueldo íntegro para lo que quieran… Cuando yo hice la mía, era mínimo para 30 años y por suerte, en 2007 me pude librar de ella. Sí, ahora estoy de alquiler, pero volvemos a lo mismo… en estos momentos (2014) por muy barato que sea el alquiler, la hipoteca vuelve a ser más económica y tal y como están las cosas hoy en día, pagar menos se agradece, pero no a cualquier precio…
Spain is different y por ello no se pueden aplicar culturas de otros paises, o no tan radicalmente. Esto no es una excusa para vivir como se vivía hace 15 años, pero no pretendamos cambiar una cultura en tan poco tiempo, esto llevará unas cuantas generaciones y, aún así no seremos pioneros en la cultura del ahorro o en la del esfuerzo.
Y en cuanto a emprendedores, muchos de ellos no saben ni lo que es emprender, ni el esfuerzo que supone, ni el cambio de mentalidad que supone. Para algunos, esto es una moda más como el Instagram, criticaban a cualquier loco que en la buena época quisiera montar su propio negocio y ahora, son ellos los que critican a los que aún piensan en conseguir un trabajo… La cutltura en mi casa siempre ha sido búscate un trabajo. Toda mi familia ha trabajado y yo, durante unos años también, pero en 2010 decidí dejar el trabajo para emprender y todavía hoy me preguntan que porqué no me busco un trabajo… Me llaman empresario y se ríen de ello, pero no les culpo, han vivido así y no ven otra cosa que no sea trabajar y tener un sueldo.
100% de acuerdo con el tema educación y más en España…
No critico tu post, pero habiendo vivido la cultura española ni confío en el país, ni dudo de que los que realmente tengan ganas de tirar del carro, lo hagan, con más o menos éxito.
Gracias y sigue así!
Genial comentario Manel! He tardado tanto porque he querido responder con 2 o 3 líneas. No podemos cambiar a un país pero poco a poco las personas. Igual algún día se llegará. Hay que dejar de vivir por encima de nuestras posibilidades, eso ya sería un buen primer paso. No tener un piso o un coche no es el final del mundo. Ahora los que no se metieron en la época de burbuja son los que se ríen. Así son las cosas…